Visita de FELIPE IV a DOÑANA
UNA CIUDAD EN LA ARENA. NOTAS SOBRE ARQUITECTURA EFÍMERA SANLUQUEÑA. EL AGASAJO A FELIPE IV DE 1624 EN EL COTO DE DOÑANA
Letizia Arbeteta 2014 (Jornada) -2016 (ed.)
Pero, sin duda, el acontecimiento más extraordinario acaecido en este escenario fue el agasajo que el VIII duque de Medina Sidonia organizó para Felipe IV, en su visita de 1624.Este suceso, por sus características y magnitud, causó un gran impacto en la época y fue divulgado extensamente, descrito en varias relaciones, que narraron con todo detalle los preparativos del duque y la estancia del monarca y su séquito, hasta el punto en que ha merecido la atención de los historiadores posteriores que, desde el siglo XIX vienen glosando el tema El impacto por el lujo y abundancia desplegados durante la jornada fue tal que se incluyó también en historias generales del reinado editadas fuera de España, como la del portugués Gonçalo Céspedes y Meneses. Esta historia fue considerada por los mismos administradores de la casa Ducal como una de las más detalladas, tal y como afirma Fernando del Oliva, al redactar en el año 1624 las cuentas del recibimiento9, señalando además que era fama «aver gastado el Duque medio millon».
Sin embargo, entre las diversas relaciones de los hechos, repetidas y copiadas entre sí, publicadas muchas veces sin las debidas referencias, existe discrepancia sobre cifras y costos (300.000- 500.000 ducados).
En cuanto a detalles descriptivos, quizás sea más prolija la de Fray Martín de Céspedes-cronista que, a pesar de coincidir en el apellido, no cabe confundir con el anterior- contenida en una carta de 16 de abril de 1624 escrita en Sevilla y publicada en 1634. Así lo considera el I marqués de Laurencín, D. Francisco Rafael de Uhagón (1858-1927), académico, político y aficionado a la caza, en el prólogo de la corta edición de 1889, dirigiéndose al reputado bibliófilo, I Marqués de Jerez de los Caballeros, D. Manuel Pérez de Guzmán y Boza:
«Si es cierto que el capellán del Duque, D. Pedro de Espinosa, Bernardo de Mendoza13, D. Jacinto de Herrera y Sotomayor, y los anónimos autores de la Verissima Relación y del Bosque de Doña Ana á la presencia de Filipo quarto, católico, pío, felice augusto, narraron por menudo esta solemne y memorable cacería, no lo es menos que en la descripción del fraile Céspedes hay algún detalle más, como la carta del Rey al de Medina, no contenida en aquéllas, el reparto de caballos y otros…»